La pandemia agudizará la desigualdad.
Ernesto
Sitamul
Revisando uno de mis
sitios preferidos en internet, como es BBC Mundo, me encontré con una ventana
que se identifica con el nombre Hay
Festival, el cual presenta una serie de 10 entrevistas con escritores y
científicos, sobre temas de interés actual, entre ellos el de la desigualdad,
que afecta a millones de personas en todo el mundo, especialmente la de países
considerados en desarrollo como las de América Latina.
Y con la pandemia
global, desatada por el nuevo coronavirus Covid-19, la desigualdad tiene malos
augurios, tiende a agudizarse por el impacto económico y social, distinto en
cada país, según su nivel de desigualdad. La crisis pandémica ha puesto en
aprietos a países desarrollados como Estados Unidos de América, España e
Italia.
Imagen tomada de Google |
Cinco meses después
de que se esparciera por el mundo el nuevo coronavirus, ya se habla de terminar
el confinamiento y de reactivar la economía. Pero la interacción social no
podrá ser la misma después de la pandemia. La vida individual y colectiva
deberá seguir determinados protocolos para evitar un rebrote. En estas
circunstancias se ha acuñado la frase “nueva normalidad”. Y eso supone un
cambio de comportamiento de la sociedad, incluidas las élites dirigentes, para
atacar, de verdad problemas históricos como la desigualdad Esa nueva realidad
(pos pandémica) debería permitir a la sociedad ver la falta de equidad como
algo anormal en pleno siglo XXI.
En Hay Festival me
llamó la atención leer (y escuchar también) las entrevistas con dos escritoras
y un cientista de la economía, hablar de la desigualdad como un fenómeno
especialmente acusada en América Latina y, por tanto, de Guatemala, cuya
posición entre los países centroamericanos, en esta materia, es
desventajosa. La desigualdad también
existe entre los países; de esa cuenta, la escritora turco británica, Elif Shafak, señala que el impacto de
la pandemia no sido igual en todo el mundo (sea por las asimetrías en sus
sistemas de salud, sea por el manejo de la crisis), destacando que los más
afectados son los pobres, los que están más expuestos, las minorías. Por ello, advierte
que es un peligro el aumento de la brecha de desigualdad, después de la
pandemia. También la escritora mexicana Lydia
Cacho se refiere a la normalidad ya conocida por sus características de
corrupción, violencia y desigualdad.
Antes y después
Cacho no quiere el
retorno a esa normalidad. Después de la pandemia, quisiera “un nuevo normal”,
basado en "nuevas normas y reglas, principios y valores para poder
convivir de maneras diferentes", aunque como ella misma reflexiona este
anhelo parece un “sueño.
Por su parte, el
Premio Nobel de Economía (2001) Joseph Stiglitz[1],
en otra entrevista de BBC Mundo, afirma que antes de la pandemia, la
desigualdad en América Latina había mejorado, aunque reconoce que no lo
suficiente, siendo Chile uno de los referentes. Después de esta crisis, aconseja
a los gobiernos de la región que asuman con seriedad dos tareas: 1) “abordar las desigualdades en ingresos y
oportunidades”, y 2) el déficit en la democracia (fragilidad del sistema).
Pero el abordaje de
esa problemática no aparece fácil para los gobiernos, como lo señala el último
Informe de Desarrollo Humano, citado por Prensa Libre[2],
el cual menciona que no basta con una mejoría en los ingresos económicos, si no se
desarrollan políticas para “reducir la desigualdad en aspectos como educación,
acceso a la justicia y género”. En la misma también se menciona que
está en juego el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).
La desigualdad en países como Guatemala
es más compleja de lo que parece, pues como señala la nota del matutino citado,
la desigualdad tiene una correlación étnica, de género y territorial. La población indígena tiene menos ingresos, menos
educación, menor cobertura de salud, menos acceso a la educación universitaria
y menos representación política.
Índice de desigualdad por género
La situación de
Guatemala, en materia de desigualdad de género es preocupante, siendo el último
lugar entre los países centroamericanos y en la posición 118 en el Ranking
Mundial, de acuerdo con el Informe de Desarrollo Humano, citado por Prensa
Libre.
Sin embargo, esa
situación no parece ocupar la atención del Estado guatemalteco. En pleno
desarrollo de la pandemia, el presidente Alejandro
Giammattei ha declarado su disposición de cerrar la Secretaría Presidencial
de la Mujer (SEPREM), con lo cual también descabezaría el seguimiento escabroso
que ha tenido la implementación de la Política Integral de Desarrollo de las
Mujeres.
País
|
Valor
|
Posición [3]
|
Costa Rica
|
0.285
|
61
|
El Salvador
|
0.397
|
92
|
Guatemala
|
0.492
|
118
|
Nicaragua
|
0.455
|
105
|
Honduras
|
0.479
|
116
|
Guatemala, 1 de
junio de 2020.
[1]
Encontrado en: https://www.bbc.com/mundo/noticias-america-latina-51277086
[2] Artículo
de Prensa Libre (2019), Guatemala, 9 de diciembre.
[3]
Ranking Mundial, encontrado en: https://www.prensalibre.com/guatemala/politica/indice-de-desarrollo-humano-revela-marcadas-desigualdades-en-guatemala/